11. La invención de Holmes
«Querido Arthur, quiero que me permitas felicitarte por tus muy ingeniosas y muy interesantes aventuras de Sherlock Holmes. Este es el tipo de literatura que me gusta cuando tengo dolor de muelas . De hecho, estaba disfrutando de una pleuritis cuando llegó a mis manos el libro. Te interesará saber, como médico que eres, que la cura fue muy efectiva... Sólo hay una cos a que me inquieta: ¿No es acaso Sherlock nuestro viejo amigo, el profesor Joe Bell?». La carta la escribe de puño y letra Robert Louis Stevenson a su ex compañero en la Universidad de Edimburgo Arthur Conan Doyle. Uno estudiaba para ingeniero y el otro para médico . Los dos jóvenes soñaban en realidad con ser escritores, cada cual a su estilo. Y los dos cayeron bajo el hechizo del doctor Bell, que, además de forense, tenía la fama de vidente gracias a su pasmoso dominio del arte de la dedu cción. Como si le hubieran descubierto de pronto el truco, Conan Doyle reconoció el parentesco entre e...